Si hablamos de riesgos laborales, en nuestro país se han producido 176.624 accidentes laborales con baja y 176.522 sin baja, en el periodo comprendido entre enero a abril de 2021. Es decir, esta cifra ha supuesto una subida de un 16,9% y de un 8,5% respectivamente, frente al 2020 y según los datos del Gobierno de España.
Sí, sabemos lo que estás pensando, ¿crees que la COVID-19 puede haber afectado a estos datos de siniestralidad laboral? ¡Pues en realidad no! La tasa de accidentes de trabajo con baja se ha reducido en un 10,4%, por lo que en este caso la pandemia no es una excusa: aún debemos mejorar mucho las técnicas de prevención de estas situaciones de riesgo.
Está claro que hay sectores más peligrosos que otros pero, aún así, todos los puestos de trabajo están expuestos a sufrir accidentes y es una tendencia que cada vez está más al alza. ¿El motivo? Desconocimiento y falta de concienciación, tanto por parte de las empresas, como de los propios trabajadores.
Te daremos 5 consejos para mejorar esta situación, pero antes de eso es importante que dejemos claro varios conceptos.
¿Qué está considerado como ‘accidente laboral’?
Tal como dice la Ley General de la Seguridad Social, artículo 156 del Texto Refundido, «un accidente de trabajo es toda lesión corporal que el trabajador sufra con ocasión o por consecuencia del trabajo que ejecute por cuenta ajena». Lo que significa que entenderemos por accidente laboral los daños físicos, enfermedades (de carácter psíquico o psicológico), que se produzcan a consecuencia del desarrollo del trabajo. Tiene que existir un nexo causal entre la actividad laborar y el daño sufrido.
La importancia de la prevención de riesgos laborales
Si la empresa articula medidas preventivas efectivas no solo protegerá la salud de sus trabajadores, si no que reducirá el número de bajas (y sus costes asociados), aumentará la productividad laboral, reducirá las paralizaciones de los procesos productivos, evitará las responsabilidades legales de la empresa y también, los costes relacionados con las pólizas de Seguros de Accidentes. Así que, como puedes observar, son todo ventajas.
¿Cómo hacer que tu empresa sea un lugar seguro y se reduzcan los accidentes de trabajo?
Te damos 5 pasos que deberías cumplir para establecer una dinámica segura en la empresa, para ti y para tus trabajadores o para la compañía para la que trabajes:
- Para mejorar debes: realizar una auditoría de prevención para plasmar el estado en el que actualmente se encuentra la empresa; medir las posibles situaciones o prácticas que pueden ocasionar algún peligro; determina e implementa las medidas que vas a tomar para reducir esos riesgos; y, en el caso de que sea necesario, corrige los peligros que están en tu mano.
- Abre los ojos: los tuyos y los de tus trabajadores. Haz que tus empleados perciban el riesgo al que se están exponiendo y fórmalos para que sean conscientes de cómo deben desempeñar su trabajo de forma segura.
- Debes establecer una política de buenas prácticas laborales para sentar precedente.
- Si has conseguido establecer todo lo anterior, este paso te parecerá mucho más sencillo: crea canales que promuevan una comunicación activa y fluida entre la persona encargada de la prevención de riesgos y el resto del equipo.
- Por último, invierte en tecnología para integrar de forma efectiva la prevención en el sistema de gestión de tu empresa, por ejemplo, el programa Delt@.
El Plan de prevención de riesgos
Este plan es la herramienta a través de la cual se integra la actividad preventiva en el sistema general de gestión de la empresa, y por el que se establece su política de prevención de accidentes laborales. Es lo que se hace después del paso 1 y 2 que te hemos explicado en el punto anterior.
Si tienes que redactar este documento, te adelantamos que tiene 4 partes de máxima prioridad que determinarán la eficacia del plan:
- Las características de la empresa: tipo de organigrama, territorio en el que está asentada, riesgos genéricos de la actividad productiva…
- La política que se va a establecer y que servirá como precedente de actuación.
- La/s persona/s que se encargará de la gestión de los riesgos y accidentes. En esta parte del documento incluiremos las responsabilidades y funciones de cada persona, los recursos destinados a esta prevención, los mecanismos que se tomarán en caso de accidente laboral y los encargados que formarán el Comité de Seguridad y Salud de la empresa.
- La evaluación de riesgos: los parámetros y características que deben cumplirse para que sea considerado como accidente laboral y la documentación necesaria para hacer frente a la situación.
Teniendo todo esto claro, ¿quieres formarte para mejorar la seguridad de tu empresas? ¡Es hora de que te lances a aprender con nt:FOR! Si eres autónomo, trabajas o estás en situación de ERTE en la Comunidad de Madrid, inscríbete en el curso gratuito de ‘Programa DELT@: Gestión de Accidentes de Tabajo‘.